Revista
El denominado “día de la liberación”, marcó un antes y un después en las relaciones comerciales de Estados Unidos con el resto del mundo. Aunque la Organización Mundial del Comercio lleva trabajando desde 1995 por reducir los aranceles que graban a las importaciones de productos, fomentando el que los países firmen acuerdos de libre comercio, esta acción no ha servido para frenar esta situación impuesta por el nuevo gobierno de Estados Unidos. Este alega que en los últimos años ha sufrido un ataque desleal de muchos países a sus productos, imponiendo aranceles y otras medidas, que los han dejado en desventaja frente a otros que fabrican o elaboran productos iguales o similares.
Ya desde el año 2018, Estados Unidos hizo un movimiento estratégico que llevó a imponer aranceles paralelos a productos determinados según el país en el que estos se producían. Por ejemplo, en el caso español desde 2018 se grabó a productos como la aceituna de mesa, el vino, el queso o el aceite de oliva con un arancel extra del 25%, aunque se informó que podrían llegar al 100%. Este hecho finalmente no se produjo, pero sí provoco que algunas de las exportaciones españolas descendieran por el alto precio de los productos, frente a los mismos productos exportados desde Francia, Italia o Portugal.
La situación actual a abril de 2025 es, de momento, diferente ya que Estados Unidos ha fijado un arancel base del 10% a todos los productos que se vayan a importar. Según las características de cada país (negociación país a país), este arancel complementario se podría incrementar, como es en el caso de Europa hasta el 20%, es decir un 10% fijo y otro 10% por ser europeo sin hacer distinción por productos o estados miembros de la Unión.
¿Cuántas empresas europeas están en disposición de cambiar su estrategia de internacionalización? ¿Cuántas tienen capital suficiente para dar este salto? ¿Cuántas tienen un análisis de mercado actualizado para identificar en qué Estado Americano es más “barato implantarse, producir y desde este distribuir?
Si analizamos las importaciones que ha recibido Estados Unidos de productos originarios de la Unión Europea, podremos ver que España ha descendido en valor. Esto indica que se está perdiendo competitividad frente al resto de países de la Unión Europea:
Países desde los que importa US en miles de USD. | Valor importado 2022 | Valor importado 2023 | Valor importado 2024 |
Mundo | 3.375.948.186 | 3.172.533.052 | 3.359.310.385 |
Alemania | 150.461.562 | 163.080.742 | 163.546.205 |
Irlanda | 82.505.724 | 82.714.948 | 103.755.092 |
Italia | 71.904.369 | 75.207.601 | 78.446.453 |
Francia | 59.106.519 | 58.927.206 | 61.157.164 |
Países Bajos | 35.636.219 | 39.378.509 | 35.051.896 |
Bélgica | 27.474.291 | 23.505.065 | 28.274.751 |
España | 24.308.118 | 24.083.997 | 22.090.849 |
Si analizamos la situación específica de España en relación a los productos del sector alimentación y bebidas que exportamos a Estados Unidos, estos son los datos (Fte: Intracen Mapa Comercial - Comercio bilateral entre España y Estados Unidos de América):
Capítulo producto | Sectores productos | Exportaciones españolas a Estados Unidos | ||
Valor en 2022 | Valor en 2023 | Valor en 2024 | ||
15 | Grasas y aceites animales, vegetales o microbianos y sus productos de escisión; grasas comestibles preparadas; ceras animales o vegetales. | 900.183 | 874.640 | 1.348.829 |
20 | Preparaciones de verduras, frutas, frutos secos u otras partes de plantas. | 388.559 | 411.469 | 454.563 |
22 | Bebidas, licores y vinagre. | 437.702 | 413.464 | 447.277 |
03 | Peces y crustáceos, moluscos y otros invertebrados acuáticos. | 164.565 | 188.305 | 200.701 |
07 | Hortalizas comestibles y ciertas raíces y tubérculos. | 140.396 | 162.606 | 181.713 |
Por lo tanto, contestando a la pregunta de este artículo, de cuáles serán los sectores en la alimentación y bebida que más veremos afectados por el arancel, de momento del 10% y otro posible 10% si Europa no negocia, ya que son sectores en crecimiento, estos serían:
No debemos dejar de observar que Estados Unidos ha llegado a comentar que, si Europa no entraba a negociar ante la posible imposición al bourbon de un arancel del 25%, respondería imponiendo un arancel al vino europeo del 200%. Afortunadamente esta situación, por el momento, se ha suspendido.
Como conclusión, la Unión Europea y España deberán negociar con cautela, ya que la imposición de un arancel mayor al 10% podrá hacer que nuestros productos comiencen a ser menos competitivos y nos lleven a plantear alternativas de negocio diferentes para seguir vendiendo, tales como implantar el proceso productivo en Estados Unidos, ya que, de esta forma, el producto podrá mantener la marca europea y/o española, aunque el producto se haya originado allí.
¿Cuántas empresas europeas están en disposición de cambiar su estrategia de internacionalización? ¿Cuántas tienen capital suficiente para dar este salto? ¿Cuántas tienen un análisis de mercado actualizado para identificar en qué Estado Americano es más “barato implantarse, producir y desde este distribuir?