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Aral Digital.- Kraft Foods ha alcanzado un acuerdo para vender su planta de Mahón (Menorca) a Nueva Rumasa, que adquirirá la fábrica a través de su filial Carcesa. Asimismo, la compañía también adquirirá las marcas de queso fundido Tranchettes, Santé y Quesilettes, aunque no El Caserío.
La operación, que está sujeta al habitual proceso de auditoría legal y financiera (due dilligence), será efectiva el próximo 30 de junio, como fecha límite. Dentro del acuerdo, Kraft mantendrá la producción de El Caserío en la planta de Mahón hasta el final de 2009 y suscribirá un contrato de co-manufactura de una parte del volumen durante tres años. Paralelamente, se establecerá un contrato transitorio de prestación de servicios, de manera que Kraft realizará de forma temporal algunas funciones de apoyo para facilitar una transición ordenada del negocio.
La planta de Mahón ocupa a 164 trabajadores fijos. Nueva Rumasa ha asumido el compromiso de mantener todos los puestos de trabajo.