Zamora Company, la compañía propietaria de Licor 43 y Ramón Bilbao, entre otras marcas premium, cimienta su crecimiento para los próximos ejercicios en la innovación sostenible con palanca para continuar satisfacción los diferentes gustos y tendencias del consumidor. El grupo empresarial apuesta por seguir ofreciendo productos innovadores con experiencias de consumo para todos los momentos, marcas sostenibles e iniciativas dirigidas a minimizar su impacto ambiental.

En la división de espirituosos, por ejemplo, Licor 43 ha sido un ejemplo de innovación social. La compañía ha reducido el peso de la botella de 70 cl, y la graduación alcohólica de varias de sus propuestas como Licor 43 Créme Brulée y Licor 43 Chocolate Delight, que utiliza además cacao sostenible. Asimismo, la marca de espirituosos dispone de una variada gama de cócteles enlatados como Licor 43 Coco Milk, listo para tomar y vegano.

Otra de las novedades basadas en la innovación que se han sumado al portfolio de Zamora Company ha sido la reducción de tintas de cartón de Martin Miller’s Original, y la reducción de vidrio y cartón de Lolea. En este camino por reducir su impacto medioambiental, Lolea Blanco Spritz ha eliminado el sleeve. En la categoría de espirituosos, destaca también la reducción del peso de la botella Villa Massa Giardino.

Apuesta por la cultura ecológica

En los vinos, todas las referencias de Zamora Company trabajan para ofrecer vinos más saludables que se adapten a los nuevos gustos del consumidor con menor graduación alcohólica y reducción de sulfitos. La apuesta por la certificación ecológica y biodinámica del grupo bodeguero revierte en vinos más saludables para el consumidor, y más respetuosos con la tierra. En esta línea, la compañía trabaja en reducir su huella de carbono reforzando su compromiso con la sostenibilidad con el objetivo, en el caso de Ramón Bilbao, de alcanzar la neutralidad en carbono en 2050.

La reducción del peso en 2023 de las botellas bordelesa Ramón Bilbao fue de 10 gr hasta los 435 gramos actuales, con el consiguiente ahorro de varias toneladas de vidrio. Por su parte, ese mismo año Mar de Frades redujo un 16% el peso de su botella albariño, pasando a pesar 48 gramos menos al reducirse de 528 a 480 gramos

El grupo vitivinícola aplica prácticas respetuosas que le permiten ser más sostenible con el planeta al crear vinos libres de sustancias nocivas. La marca Ramón Bilbao, por ejemplo, dispone de una línea de vinos ecológicos, la gama Organic, que supone la materialización de la apuesta por la innovación sostenible de la compañía y un paso más en su camino de empresa consciente. La gama Organic se compone de un tinto de Rioja y un blanco de Rueda procedentes de viñedos ecológicos certificados.

De hecho, Ramón Bilbao cuenta con seis hectáreas de viñedo ecológico en Haro, La Rioja, y su objetivo para 2024 es incrementar 20 hectáreas más. Por su parte, la bodega Cruz de Alba, en Ribera del Duero, mantiene su viñedo certificado en ecológico desde el año 2015 y aplica la viticultura biodinámica, velando por el equilibrio del ecosistema para lograr un viñedo sano y vivo, y conseguir así que el vino exprese su origen con plena definición y pureza. La bodega acaba de conseguir el sello biodinámico Demeter, una certificación que garantiza estas prácticas biodinámicas y el uso de preparados naturales. Su aplicación está permitiendo a Cruz de Alba enfrentarse a los retos actuales del sector como el cambio climático, el cuidado del entorno o la escasez de agua.

Proyectos de innovación exitosos

El éxito empresarial de la compañía se centra también en varias iniciativas enfocadas a minimizar el impacto ambiental de sus envases, analizando todo el ciclo de vida de los productos: diseño, producción, distribución y consumo. Asimismo, incorpora criterios de sostenibilidad en todos sus proyectos de innovación.

Este es el caso del ecodiseño de botellas, con la reducción del peso de las botellas y las toneladas de vidrio y, en consecuencia, las emisiones de CO2. El objetivo de la compañía es reducir un 20% para 2025 sus emisiones a la atmósfera con acciones encaminadas a rebajar el peso de las botellas y el packing, la autogeneración eléctrica y su plan de energía verde. Con estas medidas, Zamora Company busca avanzar hacia la descarbonización del modelo energético y virar hacia entornos más sostenibles.

En concreto, la reducción del peso en 2023 de las botellas bordelesa Ramón Bilbao fue de 10 gr hasta los 435 gramos actuales, con el consiguiente ahorro de varias toneladas de vidrio. Por su parte, ese mismo año Mar de Frades redujo un 16% el peso de su botella albariño, pasando a pesar 48 gramos menos al reducirse de 528 a 480 gramos.

En el cartón ondulado, la compañía ha unificado las calidades y espesores de papel logrando un ahorro acumulado cada año superior a 35 toneladas de cartón. Asimismo, viene desarrollando varios proyectos para reducir el uso de tintas y pigmentos en cajas, favoreciendo su reciclabilidad y la reducción de residuos de naturaleza peligrosa.