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AMDPress.- El grupo belga de alimentación refrigerada Ter Beke ha incrementado su facturación neta un 7,4% en 2002, alcanzado los 178,875 millones de euros frente a los 166,621 del ejercicio anterior. En lo que se refiere al resultado neto después de impuestos, ha alcanzado la cifra de 3,532 millones de euros, lo que supone un incremento del 169,8% respecto a 2001. El grupo también ha incrementado su EBITDA el 39,4%, alcanzando los 18,634 millones de euros (13,371 en 2001).
Según la compañía, el incremento en la facturación se ha debido fundamentalmente “al fuerte y continuo crecimiento de la división de platos preparados, que actualmente tiene un peso en el total del negocio del 62% en volumen en 2002 frente al 57% de 2001”.
El grupo cuenta con cinco fábricas, tres en la región de Flandes para productos cárnicos y dos en Wallonia para platos preparados y comercializa sus productos bajo las marcas Come a Casa, L'Ardennaise, Pronto, Daniël Coopman, Vamos y Les Nutons.
Ter Beke también ha continuado con su política inversora en 2002. Así, durante el pasado ejercicio el grupo realizó inversiones por valor de 11,8 millones de euros. El proyecto más importante ha sido la construcción de una nueva línea automática de producción de lasaña en la fábrica de Wanze (Huy), que ha duplicado la capacidad de lasaña en pequeños formatos de gran consumo.
Asimismo, se ha modernizado la parte más antigua de la fábrica de salami de Waarschoot y se han equipado con la última tecnología las áreas de maduración y secado.
La compañía no espera que en 2003 se produzca una fluctuación significativa de los precios de las materias primas, por lo que se prevé “un resultado positivo en los resultados del año”, según Luc De Bruyckere, director general de Ter Beke.