Bodega Cuatro Rayas impulsa la creación de nuevas marcas de vino con la ayuda de alumnos de FP de la Escuela de Profesionales Alcazarén. Los estudiantes del Grado Superior de Marketing y Publicidad del centro académico trabajan en sus propuestas de diseño integral de marca, para las que toman como premisa el lanzamiento de un vino blanco joven, de variedad verdejo y DO Rueda, tipología con la que se corresponden algunas de las referencias más reconocidas de la bodega cooperativa.

El plazo para presentar candidaturas para la imagen de este vino finalizará el 5 de diciembre y los nombres de los ganadores se darán a conocer el 21 de diciembre. El concurso cuenta con premios en dos categorías:

• Mejor propuesta global: en el que se valorará la viabilidad de la marca, la justificación y argumentación del proyecto y la calidad del diseño propuestos por el o la estudiante.
• Propuesta más innovadora: en el que se valorará la originalidad de la propuesta en cuanto a su denominación y diseño.

Colaboración entre Bodega Cuatro Rayas y el Grupo Aspasia

Este proyecto se enmarca en el acuerdo que Cuatro Rayas y el Grupo Aspasia han suscrito para estrechar lazos entre los mundos de la formación y la cultura vitivinícola. El pasado verano la Escuela de Profesionales Alcazarén y Bodega Cuatro Rayas firmaron un acuerdo de colaboración estableciendo un marco de actuación por el que los estudiantes de ciclos relacionados con el mundo del marketing, la hostelería y la gastronomía que imparte el reconocido centro formativo vallisoletano están participando en diversas actividades formativas.

De esta forma se sella una importante alianza en la que el objetivo para la Escuela Alcazarén es conocer la importancia del sector vitivinícola cooperativo en la agroalimentación, así como profundizar en el conocimiento de una Denominación de Origen como Rueda y la versatilidad elaboradora y el liderazgo en España de la variedad autóctona: la Verdejo.

Así pues, tanto el centro formativo como la bodega implicados en el acuerdo, buscan que los futuros profesionales de la gastronomía, la hostelería, el marketing o el turismo cuenten con una visión global del sector vitivinícola y que experimenten en primera persona el peso específico que la elaboración del vino y el cultivo de la uva tienen en el ámbito rural de Castilla y León, donde supone la fundamental fuente de ingresos y el principal medio de vida de un importante porcentaje de la población.